Todo en la noche,
se deshace y se disgrega
en la sombra de la luna.
un aire espeso entra
como turbio aliento de bocas
expirando palabras cansadas...
enroscándose en las sienes
como frías gotas de lluvia
empapando los sueños
que dormítan en la orilla de otro sueño...
Caminando... sabiendo
que jamás alcanzaremos
el tiempo que nos falta,
el ansia de la búsqueda,
la espera insensata
entre cuatro paredes
donde se consumen
los relojes del tiempo,
mientras el cerebro
sigue atrapado en sueños
avanzando por la espesura,
entre despojos ya vividos
en ese fuego
que lo enciende todo, que
lo funde la noche en el
vientre cavernoso del
Mundo.
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1 comentario:
Cuando no se sabe que decir porque no se puede añadir mas te digo:
Me quito el sombrero antes sus palabras. Un abrazo Ángel
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